Nuestra Filosofía

NUESTRA FILOSOFÍA de formación

Nos enfocamos en dos aspectos fundamentales.
  • Tu valioso tiempo y energía merecen ser invertidos en algo que te aporte un verdadero cambio en tu vida. Creemos firmemente en la importancia de lograr una transformación real y duradera en las vidas de nuestros estudiantes. No nos limitamos a ofrecer conocimiento teórico. En lugar de ello, nos comprometemos a acompañarte en un camino de cambio real, palpable y duradero. Nuestro enfoque no solo te permite adquirir conocimientos, sino que te lleva a experimentar tu mejor versión como un ser humano libre, capaz de desplegar todo tu potencial y vivir en armonía y plenitud. Si un camino espiritual o un curso de despertar no trae consigo un cambio tangible en tu vida, creemos que no se alinea con nuestra visión. En cambio, nosotros nos proponemos facilitar cambios de verdad, palpables y reales que transformen tu vida de manera definitiva.
  • El segundo aspecto fundamental de nuestra filosofía de formación es tu desarrollo profesional. En todas nuestras formaciones, nuestro objetivo es no sólo proporcionarte las herramientas para tu crecimiento personal, sino también prepararte para convertirte en un profesional capacitado para que puedas ofrecer tus propios servicios. Deseamos que estés en condiciones de llevar la luz a otras personas y ayudarlas en su propio proceso de transformación y despertar.

Nuestro código deontológico

Aplicar técnicas totalmente naturales.

El objetivo de un naturópata es utilizar técnicas inocuas y holísticas, en lugar de aplicar métodos y técnicas propias de un médico o un psicólogo, que están únicamente reservadas a este tipo de profesionales cualificados.

Respeto por los límites de la profesión.

Un buen naturópata reconoce sus límites y sabe cuándo es necesario remitir a un cliente a otros profesionales.

Transparencia.

Un naturópata siempre debe ser claro sobre los métodos de trabajo, sus posibles beneficios y limitaciones, permitiendo así a los clientes tomar decisiones informadas.

Ética profesional.

Un buen naturópata sigue un código deontológico que incluye la confidencialidad, la honestidad y el respeto por la autonomía de los clientes.

ASESORAMIENTO.

Escuchar atenta y detenidamente a la persona que busca ayuda o consejo e informarle sobre las posibilidades, ventajas o inconvenientes de las técnicas naturopáticas y holísticas.

Respeto a la individualidad.

Cada persona es única y debe ser tratada como tal. Un buen naturópata reconoce esta singularidad y adapta sus técnicas a cada individuo.

Educación continua.

Un naturópata comprometido está en constante aprendizaje y se mantiene actualizado con los últimos avances en su campo para proporcionar los mejores cuidados posibles.

Empatía y compasión.

Un buen naturópata muestra empatía y compasión hacia sus clientes, proporcionando un entorno seguro y comprensivo.