Apoyar a la persona para que tome conciencia de su propio estado de salud.
Nuestro compromiso
- Aplicar técnicas totalmente naturales que no representen riesgo alguno para la salud del paciente.
- Respetar la dignidad de la persona tratada.
- Tratar a la persona como un ser total: cuerpo, mente y espíritu.
- Buscar y tratar la causa real de la dolencia y no solo tratar los síntomas de la misma.
- Tratar a los pacientes como individuos únicos, y no como miembros de una categoría de enfermedad.
- Ejercer nuestro cometido, como terapeutas, sin ningún tipo de discriminación.
- Escuchar atenta y detenidamente a la persona que busca ayuda o consejo e informarle sobre las posibilidades, ventajas o inconvenientes del tratamiento.
- No crear ningún tipo de dependencia con el paciente.
- No limitar a la persona en su libertad y responsabilidad en la toma de sus decisiones.
- No interrumpir ninguna terapia alopática y/o natural, ni dejar de tomar ninguna medicina indicada por su médico y/o su terapeuta sin consultar previamente a dicho profesional.
- Preguntar al paciente si hay alguna zona de su cuerpo que no quiera ser tocada. Como regla fija, el practicante no pondrá nunca las manos sobre las zonas íntimas o sobre aquellas zonas que el cliente hay indicado.
- Cualquier información que dé la persona durante un tratamiento y/o enseñanza, será tratada con absoluta confidencialidad y discreción.
- Cuando lo consideramos adecuado para el paciente o alumno, le sugerimos para su propio beneficio una orientación hacia otro tipo de terapia, que pueda favorecer en mayor medida la mejoría del paciente.
- Es obligatoria la presencia o consentimiento por escrito del padre, la madre y/o tutor/a cuando realizamos un tratamiento o impartimos enseñanza a un/a menor de edad.